Modesta opinión de un docente - por Victor Rivas Fernández

He desarrollado mi actividad profesional durante más de una década en diversos centros educativos, impartiendo docencia en varias áreas.

En los foros de educación, se debate mucho acerca de calidad educativa.

Como padre de dos alumnos del Centro, me parece un interesante debate a lanzar en la comunidad educativa del CEIP Arcipreste de Hita.


¿Qué es calidad educativa?

¿Calidad educativa es contar con más espacios?

¿Tener cuatro aulas más en un colegio garantiza que nuestros hijos/as van a recibir mejor los conocimientos y van a poder desarrollar mejor sus competencias?

Está claro que mejoraría la logística y organización del centro. Permitiría tener mayor flexibilidad a la hora de impartir desdobles de asignaturas y posibles apoyos pedagógicos. 

En definitiva, los mimbres para una mayor atención, más individualizada. Claro, siempre y cuando, se disponga del personal para poder ofrecerlo.

Porque… ¿de qué sirven cuatro aulas si no hay recursos humanos que puedan ofrecer una mayor atención?


¿Calidad educativa es contar con más docentes que puedan atender el proceso de enseñanza-aprendizaje?

Los recursos humanos que se ofrecen vienen determinados por políticas del Ministerio de educación, una determinada ratio profesor-aula. Y sabemos que no estamos precisamente en una época en la que se pretenda disminuir dicha ratio.

Francamente, si me dan a elegir entre cuatro aulas y más profesores de apoyo en aula, para que en cada clase el tutor cuente con ayudas, me quedo con el aumento de personal:
- Prefiero más carga de docentes.
- Prefiero más profesionales que atiendan la diversidad.
- Prefiero que se introduzcan más psicopedagógos/as en los centros para orientar a docentes, familias y alumnos.
- Prefiero la intervención de educadores sociales para garantizar la integración.

¿Calidad educativa tiene qué ver con tratar de innovar en métodos didácticos y pedagógicos?

Es posible atender a la diversidad en una misma aula, es posible desarrollar aprendizaje cooperativo, es posible aumentar la motivación, es posible facilitar aprendizaje en un aula.

Puedo decir que todo esto es posible. En mi caso aprendí a hacerlo con pocos recursos, con vocación y dedicación. Para mí, las cuestiones importantes eran ¿cómo tratar de aumentar la inquietud y ganas de aprender de los alumnos? ¿Cómo conseguir que aprendieran de forma significativa? ¿Cómo posibilitar que desarrollaran sus competencias? ¿Cómo conseguir que la clase este más cohesionada? ¿Cómo mejorar el clima humano dentro del aula?

Aún así, cuando he tenido la suerte de trabajar junto con otro docente en la misma aula:
- Planificábamos a quién atender cada uno.
- Nuestra atención mejoraba.
- Nuestra sensación de desbordamiento se mitigaba.
- Los alumnos/as aumentaban su rendimiento.
- Y creo que la calidad de proceso de enseñanza-aprendizaje mejoraba.


Comparto mis reflexiones en voz alta con la intención que más madres y padres, docentes y personal del Centro pueda hacerlo.

Víctor Rivas Fernández